martes, 11 de noviembre de 2008

Formación de Recepción de servicio

Formación de Recepción de Servicio

Para la recepción de servicio se pueden realizar varias formaciones, estas se dividen en:
Formaciones Zonales.
Formaciones por carriles.

Formaciones Zonales.
Las formaciones zonales se basan en varios criterios, uno de ellos es que el equipo debe distribuirse el terreno de juego a fin de cubrir todas las posibilidades donde pueda caer el balón, así se garantiza que el podrá ser recibido en forma eficiente; partiendo de este postulado se realizan otras conclusiones como que, respetando a rotación, se conforman 2 líneas de recepción, la primera línea de 3 jugadores y la segunda de dos, en el caso de recibir con 5 jugadores. Otra idea de estas formaciones es que cada jugador responde por la zona en que se encuentra y los sectores aledaños.
Las formaciones Zonales se dividen, también, en dos posibilidades
Con 5 Jugadores.
Con 4 jugadores.

Formación Zonal con 5 Jugadores

Zonal con 5, en W, para 4-2
La formación Zonal con 5 jugadores posee básicamente dos líneas, la primera es la encargada de pretejer la zona que va desde su posición hasta los balones que caen cerca de la malla; la segunda línea se encarga de los balones que van con destino a la posición del jugador hasta la línea final. La formación más conocida en esta en la “W” o “M”. Lo anterior es cuando de está jugando el sistema ofensivo 4-2, ya que podemos ver el colocador en la Zona de frente.

Zonal con 5, en W, para 6-2
Si el sistema de juego es 6-2 la formación de recepción sería diferente ya que debe existir la infiltración del levantador zaguero.

Zonal con 5, en Semicírculo, para 6-2
Otra formación aunque menos utilizada es la 5 en semicírculo, en ella en vez de tener dos líneas de recepción se forman con el jugador del centro en la parte posterior.


Formación Zonal con 4 Jugadores

A diferencia del anterior, sólo 4 jugadores se encargan de la Recepción de Servicio, dos en la parte de adelante y 2 en la parte posterior. Este se utiliza básicamente en equipos que juegan el sistema ofensivo 6-2, para mantener el colocador zaguero cerca de la malla y a posición 2, si se debe colocar un jugador sin recibir este será, preferiblemente, el Central. Existen otras posibilidades pero estas deben ser explotadas mas adelante cuando los equipos estén conformados y se conozcan las fortalezas y dificultades de cada jugador y del equipo en sí, ya que posiblemente ese central posea buena recepción, además, acá no se ha considerado el líbero, eso modifica todo este artículo, con su aparición se debe realizar otro análisis.

Formación de recepción en carriles.

En las últimas décadas se viene realizando otro sistema de recepción que rompe con el anterior y viejo esquema, existen, ahora, otras opciones que parten de la existencia de zonas de conflicto, estas hacen referencia a los balones que viene a caer en sitios entre 2 ó mas jugadores y que ocasionan dudas por la responsabilidad de cual jugador es el encargado de realizar dicha acción. Los estudios realizados por los norteamericanos les llevó a estructurar la Formación de Recepción con 2 especialistas, en la teoría de Voleibol, son llamados Carriles A y B. se destina el nombre de carriles para diferenciarlo de la zona y para mostrar que a responsabilidad de quien recibe va desde la malla hasta la línea final en el carril que está situado.

Carriles con 2 jugadores.
Es la forma mas especializada de formación que existe, la hacen básicamente los dos jugadores que hacen las veces de puntas.
Los otros jugadores se ubican para realizar las otras funciones; pasar o atacar. Algunos equipos utilizan los líberos en estas posiciones, pero esto haría interminable las posibilidades de formación con 2 jugadores en carril, estas son las 3 primeras rotaciones, teniendo en cuanta que el sistema ofensivo que se utilizará es 5-1 ya que este sistema es para los equipos de élite con mucho trabajo acumulado.
Las otras tres rotaciones se presentan a continuación, las líneas que se observan en las gráficas son los movimientos que deben realizar los jugadores para las acciones que va a desempeñar, el colocador para pasar y los otros para atacar en los tiempos que les corresponden, es de anotar que estas solo son unas posibilidades, existen varias pero se deben modificar según el tipo de jugada que deseen realizar, pero se debe respetar un aspecto de la lógica interna del Voleibol y por ende el aspecto relacionado con la rotación.

Carriles con 3 Jugadores
Para recibir con 3 jugadores en carriles se deben tener en cuanta que existen varias formas de realizarlos y también varias formas de enseñarlo así:
Los tres de la zona de fondo, en sistema ofensivo 4-2
Los puntas y el levantador zaguero, en sistema ofensivo 4-2
Los dos puntas y el levantador zaguero, en sistema ofensivo 6-2
Los dos puntas y el libero, en el sistema ofensivo 6-2 y 5-1
Todo esto se debe entrenar en forma secuencial, primero desde el sistema 4-2, luego desde el sistema 6-2 y por último con el sistema 5-1.  Se inicia desde el 4-2 porque allí se efectúan los movimientos básicos, las posturas básicas para efectuar la recepción de servicio y la transición la ataque.  El entrenador debe determinar que formación de Recepción de Servicio va a utilizar: Zonal o Carriles,  lo anterior se debe determinar ya que cada formación tiene la postura específica para realizar la acción de recepción; en la recepción zonal, cada integrante le corresponde un espacio determinado, por ello se enseña y entrena, tradicionalmente, una posición baja y con una base de sustentación amplia ya que el espacio a proteger es corta, si se opta por la recepción en carriles, las situación debe cambiar, y allí fallamos la mayoría de entrenadores y profesores, el espacio a proteger es ahora desde la malla o net, hasta la línea final y al ancho definido por la cantidad de jugadores que les corresponda esa acción táctica, por lo tanto la postura es en equilibrio inestable, con el centro de gravedad cerca al borde anterior situado por el ancho del apoyo de los pies que está situado en las cuñas y en los metatarsos. En esta postura radica el éxito o fracaso de la recepción de servicio, en la actualidad el servicio tiene una gran velocidad y la técnica de recepción no ha cambiado, se sigue entrenando y enseñando con la técnica antigua, lo que hace que el jugador utilice la técnica de defensa en la recepción.  Quienes fundamentaron nuestro Volei decían que la crecepcion es activo de pies y pasivo de brazos, en defensa es lo contrario, en la actualidad se observa que los jugadores, por múltiples razones utilizan la única acomodación de los miembros superiores para recibir, utilizando los planos de los antebrazos como si fueran de solo dos dimensiones, por ello el balón en muchas ocasiones sale disparado hacia atrás, por olvidar que son tres dimensiones desde los ejes X, Y y Z.  Todo lo anterior porque si se tiene una base de sustentación es muy amplia, es casi imposible que el cuerpo se pueda desplazar hacia algún lado, primero se debería elevar el centro de gravedad, luego llevar el peso del cuerpo hacia el pie del lado a donde se va a desplazar y tercero se debe realizar el movimiento del mismo, con ello el cuerpo tendrá ahora otra dirección, el frente hacia una dirección que no es la que se pretende que viaje el balón, ahora si el desplazamiento es corto, el peso del cuerpo deba hacerse hacia el pie del lado contrario a la idea del desplazamiento, y este será muy corto e incómodo ya que ese apoyo anterior limitará la amplitud y comodidad de la ejecución y el resultado no será el esperado.
Partiendo del grado de exigencia y de recomendaciones desde el punto de vista de lo que se debería enseñar en cada momento, es recomendable iniciar con una recepción de 3 jugadores en cada carril, pero lo deben realizar los 3 jugadores que son zagueros, con ello se le brinda la oportunidad que todos los jugadores se enfrenten a la dificultad que implica recibir y que puedan probar si están en capacidad de hacerlo en forma adecuada.  Todo esto debería ser afianzado en la categoría Infantil.
Al pasar a Menores hace la aparición el libero, lo que posibilita la utilización de este y las dos puntas para la recepción, aunque antes de la aparición del Libero, quienes estaban responsables de la recepción era el Opuesto, estas posibilidades no se deben olvidar, ya que muchos jugadores no se sienten cómodos al ser cambiados por el libero o ser liberados de la función de recibir.  Ya acá se puede realizar el 6-2 para que existan dos jugadores que pasen y ataquen por la posición II, también pueden recibir, pasando a la posición de opuesto.


Metodología, la primera acción que se debe realizar será la del aprendizaje de los movimientos principales en cada posición en as 4 acciones que se deben cumplir en este complejo de juego.  En la zona de fondo el jugador debe ser entrenado en la postura antes de la recepción de servicio[1], a la par se deben realizar ejercicios de aplicación de la recepción de balones lanzados por los compañeros o por el profesor a modo de circuitos en pequeños grupos o en general por el entrenador.  Las condiciones deben ser facilitadas, lo que quiere decir que los balones que le sean enviados deben ser cómodos para una fácil ejecución, estos deben ser primero al cuerpo, luego que el jugador se deba desplazar de atrás hacia adelante en búsqueda del balón, luego el desplazamiento será de adelante hacia atrás y por ultimo el desplazamiento lateral y diagonal, que no debería ser muy amplio, ya que el carril a proteger es solo de 3 metros.  La resultante de este ejercicio es de un balón alto hacia en frente, por lo tanto, se debe alternar el pie adelantado, no sobra decir que los elementos que componen la técnica deberían ser aplicados como es el hecho de pedir la bola, de ubicación de frente al balón[2] y una trasmisión adecuada del movimiento.  Luego de tener afianzado el hecho de golpear el balón hacia enfrente, viene la fase de ubicación del cuerpo en los costados, para ello se ubican los jugadores en posición 7 y 9 y se les pide que, partiendo desde la misma posición de inicio del aprendizaje anterior, se realice la recepción de servicio adelantando el pie de la línea lateral en que se encuentra a fin de que el cuerpo quede de frente al centro de la cancha, lugar donde debe llegar la recepción[3].   Posterior a este aprendizaje, el jugador debe tener claro que luego de la recepción viene el ataque, esto como todos los aspectos deben ser entrenados, por lo tanto, lo más recomendable es que el mismo jugador realice una segunda acción inmediatamente después de haber realizado la recepción.  Cuando se esta entrenando la recepción se debe dejar un tiempo para que el jugador se coloque en posición de espera, no se trata de hacer defensa, este es otra diferencia con este es otro ítem del entrenamiento del Volei.


Una de las grandes ventajas de esta propuesta es que se unen dos conceptos en uno, el ataque de rotación y el ataque de especialista, es decir, que desde un inicio los jugadores aprenderán los movimientos básicos en zona de frente desde una posición[4] y luego de tenerlos bien aprendidos, podrán asimilar otras posiciones




[1] De pie, apoyado en las puntas, sobre las 5 cuñas y metatarsos, con semiflexión de rodillas y cadera para tener el cuerpo inclinado hacia adelante, con el objetivo de tener el centro de gravedad cerca al borde de la base de sustentación, para facilitar el desplazamiento más fácil del cuerpo, aprovechando que al salir el centro de gravedad se rompe más fácil la ley de inercia y se facilita el movimiento del cuerpo al encuentro de la trayectoria del balón.

[2] La postura para el contacto al balón debe ser de frente al mismo, esta es la gran diferencia con respecto a la defensa, es la posibilidad de ubicarnos de frente a la trayectoria del balón, por lo tanto la exigencia principal del entrenador será la de la ubicación del jugador con respecto al balón, el hecho de pedir la bola, hacerse responsable de la recepción y de una correcta ejecución del golpe, que exista una adecuada trasmisión de movimiento, continuar con los codos en extensión, hombros en proyección, agarre firme de las manos y un desplazamiento hacia adelante del cuerpo para iniciar la fase de apoyo o adecuación para el ataque, es vital acá que se recalque que para golpear mejor se debe correr al lugar de encuentro con el balón, parar y luego golpear, no hacer el golpe con el cuerpo en movimiento.
[3] Si bien la posición del levantador, colocador o pasador es la posición II, el balón debe ser condicionado a ser enviado al centro de la cancha a fin de poder desde allí distribuir mejor y más rápido el juego a las 3 zonas de frente y a las 3 zonas de fondo, recuerda que otra diferencia entre recepción y defensa es el lugar donde debe ser enviado el balón, desde su fase de aprendizaje.
[4] Una de las grandes discusiones metodológicas hace referencia a que un jugador debe saber todos los roles, también soy de ese pensamiento, por ello no me agrada la especialización en Minivolei, al llegar a infantil se debe o puede, determinación del entrenador y su proceso deben hacer, pero el camino se le debe hacer más fácil al jugador, permitiéndole que aprenda y relativamente conozca una posición, luego haga lo mismo con otras, el camino parece mas largo, pero es mas seguro ya que le brinda confianza al jugador con respecto a su desempeño.